Jaula


Las piernas son de una mujer fuerte
no conozco bien su cuerpo pero
toda ella parece acabar saltando
hacia afuera
 nítida, impensadamente
por el tobogán  oscuro de unos rulos cortos

Sus gestos descubren una  mujer-niña dulce
como una mandarina en pleno vuelo vertical
sonriendo, no mendigan
y esconden habilidades y  caprichos
estúpidos y perversos

Todo lo que a mi me falta
ella lo tiene
 todo lo que yo tengo
 ella lo quiere
y de cada cosa que intento dejar
ella apenas ha oído su nombre

La odio y la invento
sin saber muy bien qué fue primero
Si la quiero,
 o es sólo la zanahoria
de mis conejos.




3 comentarios:

Colabore con la opinoteca